Los Smith(s) by Gisela Faure
Voy a ponerle aire a las ruedas de la bici. Pero el bicicletero amigo, nomás me ve, me sale con un: “¿Escuchaste, escuchaste?”
No supe qué contestarle.
¿Otra de las bestialidades de los gregarios que residen en Balcarce 50? ¿O del coro de esa entelequia aún conocida como periodistas (independientes ya es demasiado)? ¿El pelado conductor con apellido difícil de pronunciar reconoció que es eunuco? ¿El Kun se hizo finalmente un harakiri?
Pero no quería herir sus sentimientos.
Mi bicicletero amigo es de esa gente que pide por favor –a veces explícitamente, a veces con la mirada o la reserva en los comentarios– no hablar de política.
Y sabemos que cuando alguien no quiere hablar de política. Cuando alguien abjura de la política. Cuando alguien se resiste a que en una conversación haya política. Cuando en un chat de fútbol alguien remarca que es un chat de fútbol y no de política. Sabemos que cuando todo esto sucede es que estamos ante alguien que votó a Milei.
Pero la cuestión era más terrenal. Aunque también abismal. Mi bicicletero amigo estaba sorprendido por la noticia.
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Según un periodista de una web musical, “en un solo día de este 2024 se publicó más música que en todo el año 1989”.
Para un economista del sector, esto tenía una razón: “La democratización del software y de los instrumentos de producción musical ha redefinido el ecosistema sonoro”.
Si lo sabrá L-Gante y toda la caterva que ha hecho música a partir del plan Conectar en nuestra Argentina que ya no existe…
Según el informe de la compañía de análisis MIDiA Research, en este 2024 habrá 75,9 millones de compositores de música en el mundo, número que debería llegar a 198,2 millones en 2030.
El señor bicicletero estaba exultante con estas cifras.
Mientras yo buscaba en mi memoria discos favoritos de 1989 (¿Doolittle salió ese año? ¿Pretty Hate Machine? ¿Paul’s Boutique? ¿El primero de los Stones Roses? ¿New York? ¿Nadie sale vivo de aquí?), el bicicletero amigo me comentó otra cosa que había escuchado en la radio: “Los consumidores -que son artista también- han transformado la fotografía (en Instagram) y el video (en TikTok), la música será el siguiente paso”.
Antes de irme con aire renovado en las ruedas de la bici, puse cinco billetes de cien en la lata de las propinas. Estaba vacía hasta ese instante.
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Esta emisión de Bailando sobre una Telaraña está dedicada a Gisela Faure, quien este jueves 28 inaugura la maravillosa muestra Retratos (con)fusiones en el Centro Cultural El Obrador, Bartolomé Mite 1670, Caba. A las 18:30 hs. Entrada libre y gratuita.
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Gracias infinitas a quienes se sumaron al decimonoveno programa de Tienda de canciones en radiosi.com.ar
Este viernes de 16 a 18 hs nos visita Camionero.
Aquí va el link para que puedan escuchar este capítulo de la Telaraña:
Se agradecerán los comentarios y recomendaciones en redes sociales.
¡Nos vemos la semana próxima!
Bailando sobre una Telaraña, la vuelta de tuerca al algoritmo.